Preparación
- Cortar el pato en trozos regulares y poner a dorar en una cazuela. Cuando esté muy dorado, sacar y reservar. En la misma cazuela, hacer un sofrito con la cebolla y el tomate, troceado y sin piel ni pepitas.
- Cuando el sofrito ya esté hecho, añadir un poco de agua para deshacerlo. Seguidamente, poner el pato y cubrirlo casi todo con el caldo que hecho previamente. Rectificar de sal y mantener la cazuela tapada para que haga hierva. Tiene que cocer un buen rato, hasta que el pato esté tierno.
- En un mortero, hacer un picadillo con ajo, perejil, almendras tostadas y un hígado de pollo previamente frito. Añadir un poco de jugo y echarlo a la cazuela 10 min antes de poner los salsifís.
- Hacer los salsifís: limpiarlos y hervirlos con agua y sal. Cuando estén casi cocidos, sacarlos, escurrir bien, enharinarlos y freírlos. Añadir a la cazuela y dejar que hierva 10 min.