El llamamiento a la participación económica en proyectos relacionados con la gastronomía es una realidad creciente
euros plato
"Buenas familias!!! Ya tenemos el horno montado!!! Ya hace una setmaneta que las obras del horno de leña acabaron. Es un precioso horno de 2,50 m de diámetro y una fogaina." Con este anuncio los responsables de la panadería La Fogaina felicitaron las fiestas de estos días, con la esperanza de comenzar el 2013 con el negocio a punto. Una iniciativa que han llevado a cabo gracias a la colaboración de los internautas que decidieron apostar por el proyecto y hacer una aportación económica a través de la página de 'crowdfunding' Verkami. Una panadería cofinanciada a través de Internet, una tendencia a la alza a la hora de arrancar ideas, proyectos y sueños que ofrece varias vertientes.
Gracias a esta iniciativa los vecinos de la Vall d'en Bas (Garrotxa) pronto podrán disfrutar de los panes hechos con harinas de trigos locales cultivados por Triticatum, levadura natural, tiempo, reposos largos y cocidos al horno de leña que ya tienen a punto. Pero no sólo esto. Los responsables de La Fogaina, auténticos amantes del oficio panarra, también pretenden "hacer cursos relacionados con la artesanía del pan y tener abierta la posibilidad de horno comunitario, es decir, que con planificación, vecinas y amigas puedan utilizarlo para hacer encuentros, cursos o sólo para cocer el pan propio".
Mientras esta panadería acaba de construirse, hay otros proyectos relacionados con la alimentación que se han hecho realidad gracias a la cofinanciación internauta. El septiembre pasado se proyectó en Palma el documental 'La vida dulce', impulsado por la periodista Marta Alonso, que retrata el oficio de panadero y pastelero de Miquel Pujol, "un repartidor de alegría que ha llegado a centenares de personas con sus 30 recetas de ensaimadas […] Narraremos la vida de este carismático artista de las ensaimadas con el escenario de fondo del cierre del horno, un símbolo para el barrio y para Palma", explican. La colaboración también ha hecho posible un proyecto audiovisual sobre la cooperativa El Olivo, otro sobre el mundo del vino en Cataluña y un cuarto sobre la alimentación a las escuelas, así como un disco, una guía sobre la gastronomía de las Tierras del Ebro, el primer festival de artes visuales y gastronomía o una campaña y guía de consumo responsable de los productos del mar.
La cofinanciación se está dibujando como una alternativa plausible para salir adelante ideas, socializar inversiones y compartir los resultados. Por el camino, mientras las iniciativas toman fuerza a medida que reciben el dinero necesario, cada tipo de contribución económica se compensa con algún tipo de regalo que varía según la cantidad asignada. De momento, una docena de propuestas se han hecho realidad, pero otros se han quedado a medio camino porque no siempre se consigue recaudar la inversión establecida. Sea como fuere, es una manera de hacer realidad la emprenedoria con la participación como elemento real de construcción.