En la Fundación Alícia somos más de hechos que de proclamas, a pesar de saber que el entorno comunicacional de hoy en día prioriza los titulares y menosprecia la sustancia. A pesar de esto, sea por prudencia o por el rigor que intentamos aplicar al trabajo, preferimos primero hacer, después validar y después explicarlo. Por eso, cuando Pep Palau nos propuso redactar un manifiesto para presentarlo en el marco del Gastronomic Forum Barcelona, coincidiendo con la Capitalidad Mundial de la Alimentación Sostenible de la Ciudad, nos costó aceptarlo.
Al final, nos convencieron de que Alícia era quien mejor podía encargarse, garantizando respeto absoluto por el que acabáramos proponiendo, y nos pusimos a trabajar buscando el que había hecho. Por lógica, por ética, por vergüenza torera, por sostenibilidad y por economía, en el mejor sentido de la expresión, el que está hecho no se tiene que volver a hacer. Sirve, eso sí, para aprender y para recoger el mejor. Así es cómo avanza el conocimiento.
Desarrollo sostenible
No podíamos hacer un manifiesto solo de chefs adscribiéndose a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, porque ya existe, pero también porque queríamos que el compromiso, que solo tendría trascendencia si lo hacía suyo todo el mundo, representara la totalidad de agentes del sistema alimentario. Por eso partimos del concepto las personas que hacemos la comida para las personas, y en un sentido que explícitamente incluye no solo la producción y la transformación alimentaria, sino también la logística, el comercio, la acogida, el acompañamiento, la investigación, la enseñanza, el periodismo y la Administración. Y por eso se leyó y firmar solemnemente por primera vez con ilustres representantes de estos ámbitos.
Sobre todo, queremos reivindicar el todavía menystingut protagonismo de las mujeres en esta tarea vital para la humanidad. También, hacer entender que necesitamos tener gente cerca trabajando dignamente en todos los eslabones de la cadena alimentaria, y que todavía hace falta que, poco o mucho, cocinamos en casa para ser felices, estar sanos y no acabar de cargarnos el mundo.
Manifiesto universal
A pesar de que en el prefacio se explique que se ha propuesto desde Cataluña, el manifiesto está pensado expresamente para avenirse a cualquier sistema alimentario del mundo sin tener que cambiar ni una coma, porque se pueda firmar de manera universal. Consecuentemente, ya se han adscrito gente e instituciones importantes, tanto de aquí, cómo de fuera.
Se tendrán que aprovechar más ocasiones y actas para continuarlo impulsando, porque solo conseguiremos que este trabajazo tenga sentido transformador cuando todas las personas que de alguna manera nos responsabilizamos de la comida de las personas de cada hogar, cada lugar, cada entorno, cada cultura alimentaria lo leemos, lo firmamos y actuamos en consecuencia. Os invito a hacerlo en la web alicia.cat.