Arroz japónica con gambas, espárragos, jengibre y salsa teriyaki

Por David Caballero

Tipo de plato Segundos

Raciones 4

Sin
gluten Sin
lactosa

Ingredientes

350 g de arroz de grano corto japonés (japónica)
16 gambas peladas
16 espárragos verdes delgados
100 g de salsa teriyaki (en tiendas orientales)
1 raíz de jengibre
una pizca de sésamo
Sésamo
Es uno de los cultivos más antiguos de la humanidad y una de las plantas de las que primero se sacó el aceite de las semillas –incluso su nombre, en sumerio, hace referencia a esta propiedad–, que todavía hoy es muy consumido en la cocina oriental, tanto en esta forma como en forma de pasta bastante líquida, la popular 'tahina', ingrediente básico del no menos popular hummus.

Actualmente han llegado a nuestros mercados las semillas, crudas o tostadas, que se usan a menudo para decorar panes (los de las hamburguesas, por ejemplo) y repostería oriental, una vez eliminada la cáscara. También, para enriquecer ensaladas o sopas, con las semillas enteras o previamente chafadas y mezcladas con zumo de limón.

La elevada proporción de calcio, que gira en torno al 1%, además de la bondad del aceite, resistente al enranciado, lo hacen un producto recomendable.
negro
un chorro de aceite de oliva
Oliva
Fruto del olivo, que, hasta que se inventó el deshuesador, estaba condenado a convertirse en aceite o a ser un aperitivo. Desde entonces, sin embargo, pudo entrar en la cocina como un ingrediente más, incluso con derecho a cocción. Y también enriquecer el abanico de productos conservados, gracias al relleno. El primero y más tradicional, el de la anchoa, pero hoy con un número interesante de variantes, como el pimiento.
virgen extra

Arroz japónica con gambas, espárragos, jengibre y salsa teriyaki Becky Lawton

Ingredientes

350 g de arroz de grano corto japonés (japónica)
16 gambas peladas
16 espárragos verdes delgados
100 g de salsa teriyaki (en tiendas orientales)
1 raíz de jengibre
una pizca de sésamo
Sésamo
Es uno de los cultivos más antiguos de la humanidad y una de las plantas de las que primero se sacó el aceite de las semillas –incluso su nombre, en sumerio, hace referencia a esta propiedad–, que todavía hoy es muy consumido en la cocina oriental, tanto en esta forma como en forma de pasta bastante líquida, la popular 'tahina', ingrediente básico del no menos popular hummus.

Actualmente han llegado a nuestros mercados las semillas, crudas o tostadas, que se usan a menudo para decorar panes (los de las hamburguesas, por ejemplo) y repostería oriental, una vez eliminada la cáscara. También, para enriquecer ensaladas o sopas, con las semillas enteras o previamente chafadas y mezcladas con zumo de limón.

La elevada proporción de calcio, que gira en torno al 1%, además de la bondad del aceite, resistente al enranciado, lo hacen un producto recomendable.
negro
un chorro de aceite de oliva
Oliva
Fruto del olivo, que, hasta que se inventó el deshuesador, estaba condenado a convertirse en aceite o a ser un aperitivo. Desde entonces, sin embargo, pudo entrar en la cocina como un ingrediente más, incluso con derecho a cocción. Y también enriquecer el abanico de productos conservados, gracias al relleno. El primero y más tradicional, el de la anchoa, pero hoy con un número interesante de variantes, como el pimiento.
virgen extra

Arroz japónica con gambas, espárragos, jengibre y salsa teriyaki Becky Lawton

Preparación

Cocer el arroz a la manera oriental: antes que nada, lavarlo bien, hasta que el agua salga muy limpia.
En un cazo, poner el arroz y el agua: añadir un 20 % más de agua que de arroz, es decir, por 350 g de arroz, 420 ml de agua.
Tapar el cazo con papel de aluminio y dejar el arroz 10 minutos, para que absorba el agua. Poner el fuego fuerte y, cuando empiece a hervir, bajarlo y tapar el cazo, sin sacar el papel de aluminio. Cocerlo 2 minutos.
Apagar el fuego y dejarlo 20 minutos, tapado.
En una sartén con un hilo de aceite, saltear los espárragos, cortados por la mitad, hasta que estén tiernos. Añadir las gambas y cocerlas 1 minuto. Rallar un poco de jengibre fresco por encima y retirarlo de la sartén.
Montaje: en un plato o en un bol, poner el arroz y añadir la salsa teriyaki y el salteado de gambas y espárragos por encima. Espolvorear con el sésamo negro.