Preparación
- Poner una cazuela en el fuego con un chorro de aceite y dorar los ajos pelados y cortados en láminas y las cebollas ralladas. Dejar cocinar lentamente. Cuando esté medio hecho, añadir el tomate rallado y dejar concentrar.
- Mientras tanto, sacar la grasa de los muslos confitados, la piel y el hueso.
- Remojar el sofrito con el chorro de vino rancio y el de coñac. Dejar que el alcohol se evapore.
- A continuación, añadir la carne del muslo confitado y el hígado graso. Dejar cocinar 4 min.
- Remojar la miga de pan con leche y añadir a la carne. Comprobar el punto de sal y apagar el fuego. Dejar enfriar la carne un poco. A continuación, pasar la carne por la picadora con el agujero mediano.
- Poner a hervir unos minutos las láminas de pasta. Enfriar en agua fría y colocar encima de un trapo blanco.
- Ir poniendo en cada lámina una cucharada de carne y enrollar los canelones.
- Hacer la bechamel hirviendo medio litro de leche. En otra cazuela, poner la mantequilla y dejar que se funda.
- Incorporar la harina y dejar cocinar 2 min a fuego suave. Añadir despacio la leche para que no haga grumos y cocinar lentamente 2 min. Rallar la trufa y el queso Urgèlia para que quede bien fuera.
- Poner al punto de sal y pimienta blanca.
- Echar una cucharada de bechamel al fondo de la bandeja de horno; poner encima los canelones, y terminar de cubrir con la bechamel.
- Hornear a 100 °C para que se calienten los canelones y servir con la bechamel de Urgèlia.