Preparación
- Hervir los boniatos enteros hasta que estén blandos (unos 20 minutos, en función del tamaño). Pelarlos y hacer puré con el pasapurés o aplastándolos con un tenedor.
- Poner en un cazo el boniato, el azúcar, la canela, la piel de limón y un poco de agua y cocerlo a fuego bajo durante 1 hora, removiéndolo de vez en cuando para que no se enganche. Si queda muy seco, añadir algo más de agua (en total, yo he puesto unos 200 ml de agua). Dejar enfriar la confitura y guardarla en un bote de vidrio en la nevera.