Preparación
- Preparar la marinada poniendo en un recipiente las costillas de cordero, el romero, los dientes de ajo aplastados, unos granos de pimienta negra y la piel de limón. Cubrirlo con aceite de oliva y dejarlo macerar toda la noche.
- Escalivar los pimientos por todos los lados, directamente en el fuego. Retirar la piel (se puede hacer bajo un chorro de agua fría). Picarlos con un cuchillo y ponerlos en un cazo, con unas gotas de aceite de oliva, el azúcar, el anís estrellado, sal, pimienta y un hilo de vinagre de Jerez. Ponerlo a cocer 15-20 minutos y enfriarlo.
- Lavar las patatas, salarlas y envolverlas con papel de plata. Ponerlas junto al fuego o directamente
a la brasa, girándolas de vez en cuando. - Retirar las costillas de la marinada, salpimentarlas y hacerlas a la brasa, hasta que estén doradas por ambos lados.
- Servirlo con las patatas al plomo y la confitura de pimientos escalivados.