Preparación
- Lavar las cerezas y quitar el tallo. Cortarlas por la mitad y sacar el hueso.
- Poner en una olla a hervir con agua y una pizca de sal. Cuando arranque a hervir, echar el bogavante y cocer 7 min. Retirar y poner en un cazo con agua fría y hielo para cortar la cocción. Escurrir y pelar la cola y las dos patas. Cortar la cola en 12 rodajas. Cortar también la carne de las patas my fina.
- En la misma agua de cocer el bogavante, escaldar el tomate durante 30 s. Enfriar, pelar y cortar longitudinalmente. Sacar las semillas y cortar en dados de 1 cm. Reservar.
- Poner las cerezas en un cazo alto y estrecho junto con medio litro de agua mineral, una pizca de sal y el vinagre. Triturar hasta que quede bien fino. Sin dejar de triturar, ir añadiendo aceite de oliva para que emulsione y quede brillante. Si queda una sopa demasiado espesa, licuar añadiendo un poco más de agua. Después, rectificar de sal y vinagre y pasar por un chino. Enfriar.
- Para montar el plato, mezclar el tomate en dados con las patas de bogavante y un poco de cebollino picado. Poner en el fondo del plato sopero. Poner las rodajas de bogavante encima, y, alrededor, la sopa.