Preparación
- Poner en remojo la gelatina en agua fría.
- Calentar la leche y fundir la gelatina escurrida.
- Mezclar la leche con la gelatina, el requesón y la miel. Incorporar la nata semimontada con movimientos suaves. Verterlo dentro del molde y reservarlo en la nevera.
- Desmoldarlo y decorarlo con unos hilos de miel.