Preparación
- Desplumar, achicharrar y limpiar el pato. Cortar en ocho trozos, salpimentar y dorar en una cazuela de barro. Una vez dorado, reservar.
- Sacar un poco de grasa de la cazuela y hacer un sofrito con la cebolla troceada y el tomate rallado, que quede como una mermelada. A continuación, poner el pato y cubrir con el caldo de carne. Cocer lentamente hasta que el pato esté tierno.
- Preparar los nabos (se tienen que limpiar, pelar y cortar en cuatro partes) y escaldar en agua y sal. Escurrir, enharinar bien y freír en una sartén con aceite muy caliente.
- Hacer una picada con los ajos, el perejil, las almendras y el hígado frito y poner todo en la cazuela. Añadir los nabos y dejar cocer unos minutos más. Probar de sal, dejar reposar y servir.