Preparación
- Con un rodillo, extender la masa de pizza muy fina, tan fina como sea posible.
- Cortar la masa en círculos de unos 8 cm de diámetro y cocerlos 10 minutos a 220 ºC, hasta que la superficie esté dorada. Dejar enfriar.
- Mezclar la ricotta con miel al gusto. Esparcirla por encima de cada base de pizza y repartir el membrillo en dados y las nueces troceadas por encima.
- Regarlo con un hilo de miel y servirlo.